viernes, 26 de junio de 2020

Viviendo 'el hombre nuevo' (1)


Si es verdad que las voces del tiempo son para nosotros voces de Dios, estamos llamados a tomar conciencia de las mismas, y a poner consecuentemente manos a la obra en nuestra vida diaria. Hemos leído en los textos pedagógicos del Padre Kentenich – y nosotros mismos lo experimentamos - que el hombre de hoy vive en un ambiente colectivista, en donde los vínculos se rompen porque impera un individualismo exagerado.

Conscientes de ello y desde la conocida actitud de “agere contra”, se trataría de vivir el ‘hombre nuevo’ en el día a día, intentando “a través del nuevo hallazgo del yo, del tú y del nosotros” dar vida a esa nueva imagen del hombre y de la comunidad que nos exigen las circunstancias y los nuevos tiempos.

Hoy me quiero detener en un aspecto central en las enseñanzas del Padre Kentenich al respecto: la “libertad” como “Leitmotiv” (idea-guía) de mi vida. ¿Qué es para mí la libertad? ¿Cómo la practico?

Libertad es sinónimo de autonomía en el ser humano, autonomía que se expresa, según el lenguaje del fundador de Schoenstatt, en la “capacidad de decidirse” y en la “capacidad de llevar a cabo lo decidido”. Capacidad que se debe dar no sólo respecto a lo que proviene de fuera, sino a lo que proviene de nuestro interior: los instintos, las pasiones, los caprichos.

El Padre Kentenich dirigió en el año 1951 uno de los terciados de la comunidad de sacerdotes Palotinos en Brasil. A ellos les habló también de este tema. Transcribo algunas de sus palabras:  

“La verdadera libertad tiene dos dimensiones, dice el filósofo:

- Primera dimensión: capacidad de decidirse.
- Segunda dimensión: capacidad de llevar a cabo lo decidido.

¿Qué es lo primero, lo esencial? La capacidad de decidirse. El elefante también puede imponerse, llevar a cabo lo suyo. No deben pensar que hoy sea fácil educar de tal manera a un ser humano, que se decida por sí mismo. Si hago chasquear el látigo o digo algo, muchos de mis seguidores dirán que sí. Pero ¡qué pocos son capaces, en caso de duda, de decidirse por sí mismos! Tengo contacto con innumerables personas. Apuesto a que hay un cierto número de ellas que, si les dijera: "vaya tranquilamente al campo de concentración y deje que le corten la cabeza", irían de inmediato sin pestañear. Como comprenderán, hay aquí una fuerte voluntad de llevar algo a cabo, como también una muy fuerte voluntad de sacrificio. Pero si ellos debieran tomar por sí solos la decisión: voy al campo de concentración o busco esta o aquella actitud, nunca llegarían a hacerlo. Puedo decirles, incluso, que una de las notas más características del hombre actual es su falta de capacidad personal de decisión.

Consideren lo siguiente: ¿cómo educó el nacionalsocialismo? ¿Cómo educa ahora la Unión Soviética? Pensar es asunto del "Führer", del jefe. Sólo resta dejarse mover, es decir, poner las piernas en movimiento. Pero ¿decidirse por sí mismo? Pocos, actualmente, son capaces de hacerlo. ............

Por eso, planteo nuevamente la pregunta: ¿Qué hago yo para que mis seguidores aprendan a decidirse por sí mismos? ¿Tengo yo personalmente el coraje de decidirme por mí mismo, sobre todo en situaciones difíciles?

Antes solía decir a menudo a nuestros sacerdotes en Alemania: en circunstancias normales, el obispado nos dice lo que debemos hacer en cada caso particular, qué organizaciones debemos crear o qué debemos hacer en contra de esta o de aquella corriente del tiempo. Pero cuando llegan fuertes enfrentamientos, como en la época del nacionalsocialismo, no hay consigna alguna que emita el obispado. Roma calla, y el sacerdote no aprendió a tomar decisiones personales en situaciones difíciles. La educación para ser capaces de decidirse es uno de los problemas más esenciales de la pedagogía actual.”

En otra ocasión, en un retiro de los Padres de Schoenstatt, en el año 1966, les diría lo siguiente:

“No sólo hay un hombre masa en el plano natural. También hay un hombre masa religioso: me inclino sin inhibición alguna ante una atmósfera pública, sin dejarme estimular por ella a decidirme, nuevamente y por mí mismo, en contra de ella. Difícilmente se pueda poner de relieve hoy en día lo suficiente la importancia que tiene la educación para la decisión por sí mismo.

Esto vale también para nosotros, cuando pensamos, por ejemplo, en nuestra Familia, en nuestros ideales de curso y de comunidad. Por supuesto, en la actualidad no podríamos hacer casi nada sin que nos expongamos a zonas de peligro. Siempre ha sido así, pero hoy es preciso acentuarlo especialmente. Por eso, la obra maestra es: donde se trata de la atmósfera comunitaria cuidar que nuestro actuar esté acompañado siempre, siempre, por decisiones personales. Donde no hay decisión por sí mismo, donde no se da oportunidad para tomar decisiones por sí mismo, somos nosotros mismos la causa —no quiero decir que tengamos la culpa— de todas las tendencias de masificación, de las psicosis de masa.

Comprendan, por eso, lo importante que puede y debe llegar a ser, en nuestra Familia, la comunidad libre. En efecto, ésta tiene como su meta máxima la educación para la capacidad de decisión autónoma, para la disposición a decidirse. Por tanto, debemos desprendernos de la masa. Porque hoy en día corre por todo el mundo una psicosis de masa. Existe hoy el colectivismo. Es fácil de entender que hoy se acentúe especialmente lo que hemos intentado desde el principio con el ideal personal. Hoy se dice en lugar de ello "personalismo".

Los hijos del profeta debiéramos estar poseídos por vivir y anunciar la misión de nuestro tiempo, y por dar una respuesta práctica a los problemas del tiempo actual.

4 comentarios:

  1. Muito obrigado, Sr. Nuño! De fato, penso que esta é a razão de nossa educação: atingir a plenitude da liberdade pessoal, com tudo o que isso significa. E muitas felicidades por seu aniversário!

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  2. Paco... pocas cosas son más difíciles que la decisión por uno mismo. Siempre tenemos excusas y una conciencia que apunta a decidir lo que te dicen que hagas. Separarnos de la sociedad de consumo, de las redes, de las masificaciones modernas que sin darnos cuenta nos llevan a tomar las decisiones no por nosotros, sino por el dominio que ejercen sobre nosotros.
    Cuánto valoro los textos que nos mostrás nuevamente. Hoy los leo con diferentes ojos. Puedo avizorar lo que el PK veía claramente. Y hoy cobran vida de nuevo esas palabras y son más actuales que nunca.
    Gracias.

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  3. gracias excelente el aporte acerca del concepto de libertad según el PJK

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  4. Gracias Paco!!! Excelente tu blog. Soy muy feliz de que me guíes en este encuentro con el pensamiento de nuestro Fundador. Bernardita de Bellavista; Casa Nazaret del Padre.

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