viernes, 21 de abril de 2023

Diferencias en la relación personal y material

Hoy transcribo las últimas reflexiones de nuestro Fundador en el tema de las diferencias entre el varón y la mujer, tomadas de las charlas del mes de febrero de 1958 en Milwaukee y que se pueden leer en las últimas entradas en el Blog. Dice así:

 “Diferencia en las relaciones

Ahí radica una diferencia muy importante. Cuando una mujer se entrega, se entrega por completo. Así, en el matrimonio, la mujer se entrega por completo al hombre. Y por lo general el hombre está predispuesto a dar simplemente sólo algo de sí mismo. Creo que por naturaleza la diferencia está ahí. Mi autoeducación debiera pues ayudarme como hombre a cambiar.

Verán, es por eso que una mujer noble es un regalo tremendamente grande. Simplemente se entrega por completo, no conoce nada más que a la otra persona, y puede hacer sacrificios al extremo. Pero estos son sacrificios que el hombre ni siquiera puede ver. El varón es generalmente más inclinado a disfrutar. A menudo se usa el tópico: Antes del matrimonio la joven dice: ahora quiero ver si puedo hacer feliz a mi futuro esposo. Y el joven dice: ¿Seré feliz en el matrimonio?

¿Entienden la diferencia? Pues ya saben, ahora ambos deben desarrollar su estilo y complementarse mutuamente ....

Para mí como hombre es muy importante entender a mi esposa. Y la mayoría de las veces no la entendemos. Nuestra esposa se entrega por completo, no solo con la cabeza. Ella también quiere darnos su corazón, quiere darnos todo lo que tiene. Ella no puede imaginarse que soy diferente como hombre, y eso causa decepciones muy serias en la vida de una mujer cuando se da cuenta por primera vez: el hombre quiere placer, pero no me quiere a mí. Vean, se necesitan sacrificios heroicos de ambos lados para mantener la línea...

Diferencia en la forma de sumirse en las cosas

Ahora viene una cuarta diferencia: la diferencia en la relación con las cosas. Prácticamente es así: el hombre está naturalmente inclinado a apegarse a una cosa. Por ejemplo, soy carpintero o lo que sea, tengo una fábrica o tengo mi afición; yo dependo de eso. Comprendan, el hombre puede entregarse a tales cosas de tal manera que no ve más allá.

Una mujer que se ha mantenido sana -siempre tengo que subrayar esto- tiene una disposición natural diferente. Puede que le apasione su trabajo, pero por naturaleza siempre quiere mirar más allá del trabajo. En el hogar, las mujeres no se conforman tan fácilmente con las cosas naturales, hay un impulso más fuerte hacia la religión, hacia Dios. La mujer está más inclinada a relacionarse con Dios: y las cosas terrenales no la satisfarán tan fácilmente como al hombre. ...

Y ahora podría ser que ustedes digan: ‘Oh Dios mío, lo que el Padre ha dicho – yo soy hombre, en mi caso estoy convencido de que ha acertado plenamente, pero ¿lo que ha dicho de la mujer?’. También puede ser todo el contrario. Por eso quiero subrayar que yo tipifico. Yo he descrito en ambos casos el ideal, pero en la práctica se mezclan las actitudes y posturas, pudiendo llegar incluso ha fundirse ambas en una unidad.”

 

1 comentario:

  1. La entrega total... es quizás u lindo punto para trabajar en los varones también. Gracias por este texto Paco!

    ResponderEliminar